04 de Enero de 2012
Los vapores obtenidos de planchas con tanques de agua suministrados por gravedad no pueden compararse con un vapor expulsado por un calderín eléctrico a una presión que varia entre 15PSI y 40PSI, dicha presión desarruga una tela con mucha más facilidad y dicho vapor es absorbido por una turbina dentro de la mesa que hace que la prenda permanezca quieta y fría para que no se siga arrugando.
Este calderín eléctrico tiene una carcasa de aluminio para que no sufra de oxidación y su olla interna está fabricada en acero inoxidable que la hace fuerte y no contamina el agua de oxido de hierro, posee tres mecanismos de seguridad para que no haya una explosión por presión sin control; dichos mecanismos son: Termostato, presostato (interruptor de presión) y una válvula de alivio manual de presión.
Este calderín eléctrico tiene nivel de agua en el exterior y bomba eléctrica para su fácil llenado; también tiene grifo de expulsión de agua para mantenimiento y llave en la parte superior para el llenado manual.
